Build your Layers

Corrector estilo mapache: Este es más que seguro que lo conozcas y hayas tenido algún encuentro del tercer tipo con el. Esto es causado por: 1- El corrector que estas usando es muy claro (probablemente casi blanco). Cada tipo (color) de ojeras tiene un tono de corrección y si usas el incorrecto, lo más seguro es que estés creando el efecto contrario y las acentúes. 2- Tu corrector no debe ser mas de 1 o 2 tonos mas claros que el tono de tu piel. Los colores claros, en especial el blanco, atraen la luz y esta atraerá atención al área, y eso no es lo que queremos,

Delineado o ala de pájaro atrofiado: icónico de Amy Winehouse. No hay mucho de que decir, este estilo solo hará tus ojos verse deformados. Lo ideal sería seguir finamente la forma de tus ojos, bien pegadito a la pestaña y hacer el ala siguiendo el ángulo de tu parpado inferior y bien fina. 

La sombra sin difuminar: La idea de un maquillaje bien hecho es que todo vaya fundiéndose poco a poco con la piel, de manera que todo se vea lo más natural posible. En el caso de la sombra, debe integrarse con los demás colores que apliques y finalmente con la piel, formando un degradado. Puedes difuminar los bordes superiores con una sombra mas clara o simplemente con una brocha limpia.

Base de tono incorrecto u oxidada: es muy fácil equivocarse con los colores y tonos de nuestra base y podemos terminar en dos extremos. Como Snooki o como Paris Hilton. NO pruebes tu base en la muñeca, por amor a Jesús, tus muñecas no son del mismo color que tu cara. Pruébala justo en la línea de la mandíbula y trata de usarla durante un rato, dar una vuelta y verla a la luz del sol. La base puede ponerse más oscura al sellarse, por un proceso llamado oxidación. Si tu cuerpo está mas bronceado que tu cara, puedes optar por un color igual al de tu cuello para que todo se vea bastante igual. Además, si tienes que elegir entre dos colores que se acercan bastante al tuyo, pero ninguno es exacto, usa el más claro, luego puedes oscurecerlo un poco con un polvo más oscuro o un bronceador. Si tienes un poco más de dinero, compra ambas y mézclalas para llegar al tono perfecto. Ensayo y error.